martes, 22 de marzo de 2022

 radiestesia para principiantes

2 comentarios:

  1. Reflexiones de un Radiestesista.

    Para toda la gente que solamente sabe criticar y poner en evidencia la ciencia de la Radiestesia y de los Zahories, mi pregunta es ¿porqué no se les habrá ocurrido al menos ojear un libro de radiestesia? La pregunta es muy fácil de contestar, ¡¡prefiero criticar que aprender!! Hay más libros escritos de radiestesia, que de aquellos que difaman esta ciencia.
    Yo mismo era incrédulo sobre esta ciencia, pero fue más mi intención de aprender que la de criticar. Así fue como leyendo, aprendiendo y practicando me inicié en este mundo tan fascinante de la radiestesia y del zahorí. Ahora con mis más de 40 años de experiencia, puedo recomendar que se aprenda de esta ciencia que nos puede beneficiar en múltiples aspectos. Siempre les digo a mis alumnos que lo que menos importancia tiene, es el buscar agua subterránea, eso, lo puede hacer cualquiera con un poco de intención y practica, es más importante el descubrir aquellas energías telúricas que nos pueden beneficiar o afectar e incluso enfermar, en nuestro domicilio o lugar de trabajo.
    Como son las fallas telúricas, los vórtices telúricos, las chimeneas cosmotelúricas, las corrientes de agua subterráneas, las líneas Ley, Madre, Curry, Hartmann, ondas de forma, etc.
    Porque ahora me dirán que no existen las redes telúricas, y yo les pregunto, ¿aún no se han dado cuenta que la Tierra, el planeta donde vivimos, no es plana si no esférica y tiene un campo electromagnético y un campo gravitacional? Seguramente aún están en ese estado de ignorancia que suele estar una gran parte de la humanidad. ¡No saben que las auroras boreales y australes las produce el viento solar! ¡No comprenden el porqué se forman las tormentas eléctricas! ¿Por qué caen los rayos a tierra o se propagan entre nubes de diferente polaridad? ¡¡Señores, el Universo es pura energía y todo lo que contiene, tiene energía, bien sea positiva o negativa!! Y si el Cosmos está cargado con iones positivos, la Tierra está cargada con iones negativos y vemos ese intercambio en las tormentas eléctricas y las auroras. Y gracias a este intercambio continuo del campo eléctrico Cosmos-Tierra, Tierra-Cosmos, es esta alteración cosmotelúrica, lo que detectan los radiestesistas y los zahories. Ese pequeño campo eléctrico es el que percibe su cuerpo, ―no las varillas o péndulos―, y a través de su sistema nervioso y músculos los transmite a los utensilios que lleva en las manos.
    Es el prospector y no los utensilios el que detecta cualquier anomalía que pueda haber en el terreno, bien sea agua o líneas de corrientes telúricas, que las hay por todas partes. Los utensilios pueden ser de cualquier material o forma, no tienen mayor importancia, pero siempre es recomendable el que sean de un material natural o metal noble. Yo mismo y muchos zahories y radiestesistas no los usamos para detectar lo que hay en el terreno, solamente con las manos e incluso a distancia, se puede detectar, pero eso requiere mucha práctica, es lo que se llama teleradiestesia.
    Estas corrientes telúricas son producidas por el campo magnético de la Tierra, así como por el campo eléctrico, por el frotamiento del núcleo interior, por la rotación de la Tierra, y por una infinidad de fenómenos que producen energía y esta, se transforman en ondas vibratorias que son captadas por personas sensibles entrenadas para estos trabajos, llamados Zahories o Radiestesistas.

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  2. El legendario escéptico James Randi en su ignorancia, quiso desafiar a los zahories que se presentaron, a descubrir porque tubería enterrada que había preparado, pasaba el agua, no comprendiendo que es muy diferente una corriente de agua subterránea que fricciona sobre la tierra a una tubería de plástico y más redonda.
    Primero, el agua que pasaba por dentro de la tubería no tiene fricción sobre las paredes de la misma, por lo tanto no hay ese pequeño campo eléctrico que se produce por fricción. Prueben a frotarse las manos entre si rápidamente y notaran que se produce un tipo de energía que se traduce en calor, pues lo mismo ocurre con el agua, ese frotamiento con las piedras o tierra produce una energía que se transforma en una pequeña corriente eléctrica, que es la que detecta el zahorí.
    Segundo, el campo magnético terrestre envuelve la tubería enseguida, por ser tan diminuta ―en comparación a la Tierra― y redonda, o sea que es indetectable, y el agua de por sí no es detectable, porque es diamagnética, lo que se detecta, es la variación del campo electromagnético al salir a la superficie por efecto de la corriente de agua, ya que según va aumentando la distancia entre el suelo y el zahorí, esta se va debilitando hasta ser indetectable.
    Cualquiera con buena disposición puede ser un buen zahorí. No se necesita tener un don especial, pero si mucha practica. Aunque las energías que salen de la Tierra no se ven, tampoco vemos las radiaciones de una fuente de calor o de frio, o las microondas de un aparato calefactor, o los rayos X, la humedad, etc., pero estar están.
    Pues de la misma forma están estas energías cosmotelúricas, que no se ven, pero existen, ―algunos videntes sí que las ven―.
    Un buen Zahorí puede detectar las corrientes subterráneas en un paraje donde el nivel freático es muy alto, porque le agua del nivel freático que está inmóvil y estancada, emite una radiación muy débil y es de una gran superficie, y es en los bordes donde se detecta con mayor intensidad y la subterránea en movimiento tiene mucha más intensidad y menos superficie y según a que profundidad se puede detectar.
    Algunos se creen que hasta que no hubo geólogos e ingenieros de minas con sus estudios hidrológicos, no se habían descubierto pozos para saciar la sed o regar los campos de cultivo. Estos estudios Universitarios son recientes, la Rabdomancia existe desde los principios de la Humanidad.
    Esto es solo un pequeño comentario para despertar ese gusanillo explorador que todos llevamos dentro, y poder beneficiarnos de todo aquello que aún ignoramos.
    Maestro Salmaru. mundozahorí.blogspot.com

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